jueves, 23 de septiembre de 2010

La canción de la semana

Los The Doors relizaron una canción que podemos denominar como "curiosa" despues de la muerte del cantante del grupo Van Morrison, os pasamos un enlace por si no la conocías.

domingo, 19 de septiembre de 2010

FIEBRE DE LAS CABAÑAS

La fiebre de las cabañas es un trastorno psiquiatrico caracterizado por una percepcion hibrida de la realidad y la fantasia. Se le denomina asi, despues de decribir muchos casos de mineros en Alaska quiene rodeados de la nieve se resguardaban por periodos prolongados en cabañas aislandose asi de una realidad comun, y creando o fabricando su propia realidad fusionando fantasias individuales o colectivas con los remanentes de realidad que recordaban. Mientras en el exterior de su estructura mental, la realidad tangible continua, las personas que padecen la fiebre de las cabañas hermetizan aun mas su amalgama de ideas blindandolas aun con ideacion persecutoria o paranoide. Su egocentrismo, egolatria y narcisismo que aunque muy relacionados no son lo mismo, acaban por desenmascarar una personalidad megalomanica con delirio de mesias, y que por desfortuna pueden arrastrar personas con oligofrenia y bradipsiquicos que son facilmente persuadible y manipulables. Los sintomas mas clasicos de estos enfermos son ideacion persecutoria, hostilidad, intransigencia y actitud beligerante. Si conoces alguien asi, es necesario someterle a tratamiento psiquiatrico urgente. ¿Conoces a alguien asi?.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

La cigarra y la hormiga


¡Qué feliz era la cigarra en verano! El sol brillaba, las flores desprendían su aroma embriagador y la cigarra cantaba y cantaba.
El futuro no le preocupaba lo más minimo: el cielo era tan azul sobre su cabeza y sus canciones tan alegres... Pero el verano no es eterno.
Una triste mañana, la señora cigarra fue despertada por un frio intenso; las hojas de los árboles se habían puesto amarillas, una lluvia helada caía del cielo gris y la bruma le entumecía las patas.
¿Qué va a ser de mí? Este invierno cruel durará mucho tiempo y moriré de hambre y frio, se decía.
¿Por qué no pedirle ayuda a mi vecina la hormiga?.
Y luego pensó:
¿Acaso tuve tiempo durante el verano de almacenar provisiones y construirme un refugio?
Claro que no, tenía que cantar. Pero mi canto no me alimentará.
Y con el corazón latiéndole a toda velocidad, llamó a la puerta de la hormiga.
¿Qué quieres? preguntó ésta cuando vio a la cigarra ante su puerta.
El campo estaba cubierto por un espeso manto de nieve y la cigarra comtemplaba con envidia el confortable hogar de su vecina; sacudiendo con dolor la nieve que helaba su pobre cuerpo, dijo lastimosamente:
Tengo hambre y estoy aterida de frío.
La hormiga respondió maliciosamente:
¿Qué me cuentas?, ¿qué hacías durante el verano cuando se encuentran alimentos por todas partes y es posible construir una casa?
Oh... No vayas a creer ni por un momento que estuve ociosa —dijo la cigarra, tosiendo—. Estuve cantando sin cesar. ¡Todos los días!, respondió la cigarra.
¿Y qué? interrogó la hormiga.
Pues ... nada, murmuró la cigarra.
¿Cantabas? Pues, ¿por qué no bailas ahora?
Y con esta dura respuesta, la hormiga cerró la puerta, negando a la desdichada cigarra su refugio de calor y bienestar.

Formas básicas de interacción

¿En qué zona estáis?

jueves, 9 de septiembre de 2010

¿Donde están las llaves?


Yo tengo un castillo, matarilerilerile
Yo tengo un castillo, matarilerileró, chimpón.
Donde están las llaves, matarilerilerile
Donde están las llaves, matarilerileró, chimpón.
En el fondo del mar, matarilerilerile
En el fondo del mar, matarilerileró, chimpón.
Quién irá a buscarlas, matarilerilerile
Quién irá a buscarlas, matarilerile, chimpón.
Irá Carmencita, matarilerilerile
Irá Carmencita, matarilerileró, chimpón.
Qué oficio le pondremos matarilerilerile
Qué oficio le pondremos matarilerileró, chimpón.
Le pondremos peinadora, matarilerilerile
Le pondremos peinadora, matarilerileró, chimpón.
Este oficio tiene multa matarilerilerile
Este oficio tiene multa matarilerileró, chimpón.
Le pondremos enfermera matarilerilerile
Le pondremos enfermera matarilerileró, chimpón.
Este oficio tiene multa matarilerilerile
Este oficio tiene multa matarilerileró, chimpón.
Le pondremos bailarina matarilerilerile
Le pondremos bailarina matarilerileró, chimpón.
Este oficio sí le gusta, matarilerilerile
Este oficio sí le gusta, matarilerileró, chimpón.
Donde están las llaves, matarilerilerile
Donde están las llaves, matarilerileró, chimpón.

HOMMER NO SIEMPRE ESTÁ DORMIDO


ABRAHAM MODELO DE “CONFIANZA EN DIOS”

QUEREMOS:
a) Descubrir lo importante que es para un cristiano confiar en Dios.
b) Aprender a confiar en las personas que nos quieren.
c) Conocer el personaje de Abraham y porque la Biblia lo considera modelo de confianza en
Dios.
d) Averiguar por qué el plan salvador de Dios comienza con Abraham y culmina con la entrega
de su hijo Jesús.
e) Descubrir que Dios cumple su palabra, según nos lo demuestra Jesús con su vida y su
entrega en la cruz.
CONECTAMOS:
Llega un compañero nuevo al colegio. Es un niño inmigrante. De otra nacionalidad. Apenas
conoce nuestro idioma. Un grupo de compañeros se hacen amigos de él. Le ofrecen su amistad. Un
día quedan con él para jugar al futbol después del cole. Pero no van y le dan plantón.
El les espera durante largo rato porque piensa que sus amigos no le fallarán, pero no
aparecen… Al día siguiente le piden disculpas y le dan escusas de porque no asistieron. Pero él
ahora ya no sabe si confiar en ellos o no….
PUESTA EN COMÚN:
· ¿La confianza en los amigos y en las personas que nos quieren es importante para
nosotros?
· ¿Te ha pasado alguna vez algo parecido?
· ¿Cómo te sentiste o te sentirías por ello?
· ¿Qué hiciste o harías?
· ¿Y si eres tú el que se comporta así?
· ¿Se puede confiar en ti, eres digno de confianza para tus padres, abuelos, hermanos,
amigos profesores?
LEEMOS:
El libro del génesis nos cuenta la historia de Abraham. Modelo de confianza en Dios. Un gran
personaje del pueblo de Israel, el primer patriarca. Por su confianza en Dios, judía, cristiana y
musulmanes lo consideran como el “padre de todos los creyentes”.
Combinamos las palabras del texto bíblico con el adaptado a su nivel: Abraham era un pastor
nómada, estaba casado con Sara y no tenían hijos. Vivía en la región de Mesopotamia. Abraham
creía en un solo Dios a diferencia de los de su época. Dios le dijo: Génesis Cap. 12, 1-3 “sal de tu
tierra….yo te haré cabeza de una nación grande….”.
Dios cumplió su promesa: cap. 15, 5-6 “mira el cielo….” (leemos). Quiso sacrificar a su hijo como
muestra de su confianza dándole lo mejor que tenía. Cap. 22, 11-12.
SABIAS QUE:
Para la comprensión del texto:
Abraham era pastor nómada, iba de un lugar para otro con sus rebaños. En la antigüedad era
normal ofrecer sacrificios a los dioses. Se sacrificaban animales e incluso a los hijos primogénitos.
Con él nació el “pueblo de Dios”.
Conocer las costumbres de la época permitirá comprender mejor la historia de Abraham y el
mensaje de la biblia:
a. La sociedad estaba organizada en tribus dirigidas por un jefe o patriarca que era el que
poseía la autoridad y el respeto de todos.
b. Canaán, región donde fue Abraham desde su tierra: Mesopotamia; era un lugar de paso
entre la citada y Egipto. Por allí pasaban comerciantes en sus caravanas y agricultores y pastores a
los mercados para intercambiar sus productos.
c. Los pastores nómadas dependían del clima y de los pastos, en época de sequia debían
desplazarse con la esperanza de encontrar tierras más fértiles. Su confianza estaba depositada en
la naturaleza y en Dios.
COMPRENDER EL TEXTO:
CLAVES DEL TEXTO
- Las costumbres de los nómadas.
- Su creencia en un solo dios.
- Su confianza plena en Dios.
- El cumplimiento de su promesa.
- El rito de los sacrificios como ofrenda a Dios. Para hacer una alianza o pacto solemne se
ofrecían animales partiéndoles por medio. El que faltase a lo prometido debía ser tratado como
aquellos.
HERRAMIENTAS PARA COMPRENDERLO:
- La historia de Abraham nos recuerda que Dios es fiel a su palabra y la cumple.
- Confiar en Dios es dejarse amar por él y acoger su salvación. Eso es lo que hizo Abraham.
- Dios tiene un plan de salvación para toda la humanidad y elige un pueblo para llevarlo a
cabo. Hizo un pacto, una alianza con el: “yo seré tu dios y el de tus descendientes” (Génesis 17, 7).
Así nació el pueblo de Dios que con el tiempo se llamo Israel.
- Dios es un padre bondadoso que nos ama sin condiciones y se ocupa de nosotros. Por eso
merece nuestra confianza.
LENGUAJE SIMBOLICO:
“ABRAHAM” es símbolo de confianza en Dios.
“LA CRUZ” es símbolo de la entrega de Jesucristo para salvar a la humanidad y renovar el pacto
de Dios con los hombres formando un nuevo pueblo de Dios: el de los que confían en el, aceptan
su salvación y cumplen su voluntad.
Trabajar los conceptos: culto a los dioses, sacrificios, ofrendas, religiones politeístas, mitos,
promesa.
VIVIMOS:
La Biblia me enseña que:
- Confío en las personas que me quieren, que se preocupan por mí, se interesas, me tratan
bien, igual que Dios me ama, me escucha, me cuida.
- En nuestra vida diaria hay personas que merecen nuestra confianza.
- Si confías en tus padres cumplirás su voluntad, lo que te pidan, porque sabes que te quieren
y quieren lo mejor para ti.
OTRA MIRADA:
La historia de Abraham es la de muchas personas que tienen que dejar su tierra y emigrar a otro
país, por muchas razones sobre todo para salir de la pobreza y vivir con mayor dignidad.
¿Y nosotros que les ofrecemos cuando llegan a la escuela? ¿Qué podemos hacer? ¿Qué sentimos
hacia ellos? Pena, tristeza, fraternidad.
Nos podemos poner en su piel, en su lugar. Hablar de los casos vividos.
VALORACION:
a. Han descubierto que Dios cumple su palabra, que nos quiere sin reservas, infinitamente.
b. Han aprendido a valorar al otro, a respetar las otras culturas, a quererse para poder amar a
Dios.
c. Sabe describir la relación de Abraham con Dios.
d. Reconoce la importancia de la relación íntima y de confianza plena en Dios.
Yolanda Muñoz González

EL VIRUS DE LA ENVIDIA

Uno de los comportamientos considerados más nocivos en las relaciones personales, es sin duda alguna, la envidia, pues nada grato es pensar que alguien experimente malestar por el hecho de que logremos tener salud, dinero o amor.
Comencemos por decir que la envidia es un estado interno limitador, generador de frustración y sufrimiento, que experimentan algunas personas ante éxito o el bienestar de otros. La base de la envidia, de acuerdo con Francesco Alberoni, estudioso del tema, se basa en la existencia de dos variables, el deseo y la comparación.
Si deseo algo que no poseo y me comparo con otro que sí lo posee, el resultado es un proceso de incomodad que puede llegar a ser insoportable para quien la padece. El alcance de la envidia es infinita, pues todo puede ser envidiado. De otros, podemos desear su belleza, su salud, su pareja, su nivel económico, su prestigio social, sus posesiones materiales o incluso su grado de felicidad. La causa de la envidia reside en la baja autoestima. En un escaso amor propio; en una falta de valoración y aprecio de las maravilla que somos en potencia, los seres humanos.
El envidioso revela un franco desconocimiento de sus recursos; de sus dones, habilidades y talentos. Puede decirse que es más sana la envidia infantil, pues los niños carecen de los recursos para obtener lo que desean y dependen de sus padre o representantes.
Los adultos, en cambio, como seres dotados de incontables posibilidades para satisfacer sus expectativas, no pueden justificar el estancamiento emocional de la envidia, el cual es, por cierto, repudiado socialmente, pues la sociedad tiende a valorar a sus héroes y líderes, a aquellos que se han esforzado para sobresalir, ganar, triunfar. La envidia puede traer consigo efectos devastadores: Nos produce sufrimiento, y en muchos casos nos lleva a actuar de manera hipócrita, desleal y destructiva.
Quien ha sido contaminado por el virus de la envidia, sólo ve defectos en el otro, se torna hipercrítico o actúa de manera indiferente con quienes son objeto de su inaceptación. Existen algunos indicadores que nos permiten reconocer la llegada de la envidia, cuando proviene de otros hacia nosotros: - Cambios en su forma de tratarnos en la medida en que nuestro éxito es mayor. - Intentos solapados o evidentes de destruir nuestra reputación.
- Aumento de la tendencia a criticarnos y buscarnos defectos. - Aumento en formas de comunicación viciadas como la ironía o el sarcasmo.
- Intentos de bloquear nuestros logros. - Coalición o unión con otros envidiosos.
- Evidencias de malestar ante nuestros éxitos. - Ocasionales muestras de indiferencia y negación a celebrar nuestros logros. Aunque no lo parezca la envidia tiene un lado positivo.
Convertida en admiración por el otro, o por natural competitividad humana, puede estimularnos a imitar aquello que anhelamos y que destaca en aquellos a quienes envidiamos.
Experimentada así, puede llegar a ser un positivo detonante de logros y agente causal de superación. Sin embargo, fuera de esa excepción, representa una negación de la empatía y sus consecuencias son invariablemente dañinas.
No por nada ha sido catalogada como uno de los "pecados capitales". ¿Qué puedo hacer ante los que me envidian? - Sepa que la envidia nace del miedo y que es un sentimiento frecuente y natural.- Evite contar sus planes para evitar los sabotajes externos.- No grite a otros sus logros y si lo hace evite actuar con arrogancia.- Halague lo positivo que vea en los envidiosos para que reconozcan su propio poder. ¿Qué hacer cuando el envidioso soy yo?- Céntrese en su propia vida, acepte y agradezca lo que es y lo que tiene.- Evite compararse con los demás.- Haga planes de largo plazo, organícese a su tiempo cosechará lo sembrado.- Acepte que no todos tenemos el mismo talento ni el mismo destino. En conclusión, la envidia es un estado limitador surgido de la baja autoestima, que se basa en una comparación negativa con otros cuyos logros consideramos injustos y amenazantes para nosotros. Superarla implica desarrollar autoconfianza, centrarnos en nuestra vida más que en la de otros, compararse con uno mismo y no con los demás, aprender a controlar la reactividad destructiva, ponernos en el lugar de la persona envidiada y priorizar ante todo el valor de las buenas relaciones. Si desea usted vivir una vida alegre, armónica y productiva, es necesario que se vacune contra el virus de la envidia.
Autor: Dr. Renny Yagosesky
AUTOAYUDA Y SUPERACIÓN PERSONAL